Brissa Montero
Al alcalde de Apizaco Javier Rivera Bonilla conocido en el argot político como El Patitas de Molcajete, le desinteresan los actos delictivos que se suscitan en la capital del crimen y prioriza andar de aplaudidor en los eventos de los 500 años, que ordenar operativos y acciones que pongan un freno a los actos delictivos, que hasta a las afueras de su oficina se cometen.
Entre esos actos delictivos, fue el robo de llantas que sufrió una camioneta de reciente modelo con placas del estado de Veracruz que fue estacionada sobre la avenida 16 de septiembre entre Mariano Matamoros y Venustiano Carranza de la colonia centro en la ciudad de Apizaco y los amigos de lo ajeno la dejaron en ladrillos.
Según reportes, el robo de los neumáticos se dio la madrugada del pasado lunes en una de las principales avenidas de la capital del crimen, justo a unas cuadras de la Presidencia Municipal.
Ese ilícito se suma a una ola de actos delictivos en el gobierno del ex priista que anda más ocupado en lucir en actos sociales que se realizan en municipios circunvecinos que en aplicar acciones contundentes que erradiquen la ola delictiva que azota al municipio de Apizaco desde su llegada.
