Inusual operativo policiaco fue montado para detener a policías ministeriales borrachos y al final son rescatados para que no les hicieran nada a los ebrios servidores públicos
Brissa Montero
Agentes de la Fiscalía General de Justicia en el Estado (FGJE) provocan un fuerte operativo policiaco porque andaban borrachos a bordo de una unidad oficial con armas de cargo, nadie les hizo nada, al grado que un mando superior fue a rescatarlos, para que pudieran seguir la peda en lugar de ponerlos a disposición.
Una persecución que se suscitó la tarde noche del jueves desde el municipio de San Cosme Xaloztoc porque un automóvil particular con estrobos circulaba a toda velocidad, provocó que se implementara un operativo policiaco para detener a los presuntos infractores quienes finalmente pararon su loca carrera en los límites de los municipios de Panotla y Totolac.
El reporte del vehículo sospechoso un Volkswagen Jetta color blanco de reciente modelo, terminó en una persecución de película en la que participaron decenas de patrullas.
Fueron policías de Xaloztoc quienes reportaron al C5i al filo de las 21:45 horas, que un automóvil se desplazaba a toda velocidad con dirección a la capital del Estado y el copiloto del vehículo sacó varias ocasiones un arma de fuego por lo cual los uniformados solicitaron apoyo a sus pares.
El fuerte operativo alertó a la población ya que se sumaron elementos de a Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Guardia Nacional, de la MARINA, y la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) y tras varios kilómetros de persecución, lograron detener el automóvil sobre la carretera Tlaxcala-San Martín, entre los límites de Totolac y Panotla.
Al descender del automóvil, los sujetos se identificaron como agentes de la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) Rafael Azariel Molina Carro, policía de investigación y Alfredo Domínguez Aguilar, inspector general.
Los funcionarios al descender de la unidad oficial lo hicieron en evidente estado de ebriedad, tambaleándose y con un fuerte olor alcohólico ante el asombro de los uniformados.
Tras confirmarse que era personal de la FGJE en activo y que el vehículo es propiedad del Gobierno del Estado, con toda impunidad se permitió que los ministeriales continuaran su camino bajo custodia de su superior, Mario Herrera Juárez, comisario de la Policía de Investigación, quien acudió al sitio para “rescatar” a sus subordinados.
La decisión causó molestia entre policías y ciudadanos, ya que tuvieron que ser presentados ante el Agente del Ministerio Público por la intensa movilización policiaca que provocaron y ser sancionados por esa irresponsable actitud de conducir en estado de ebriedad, sacar amas de uso oficial y conducir en Estado de ebriedad ya que pudieron haber provocado un percance vial.
Con información de La Prensa de Tlaxcala